El congelamiento en popularidad de Hipólito es fase previa a su caída .

La persuasión política no se produce de un día para otro, ni de la noche a la mañana. La persuasión, más aún, el cambio de simpatías y de preferencias electorales, es un proceso mental que conlleva varias fases. En el sondeo de la Gallup realizado del 11 al 15 de agosto –hace tres meses- Hipólito Mejía apareció con un 47.9 % y Danilo Medina con un 33.4%. O sea que el candidato del PRD aventajaba en 15 puntos al candidato del PLD. Ahora, en el estudio de campo realizado del 11 al 14 de noviembre, el escenario es muy diferente. Hipólito Mejía aparece estacionado en 47.9%, mientras que Danilo Medina tiene 42.6%, experimentando un crecimiento en simpatías de 9.1%.

De acuerdo con la Gallup, Hipólito Mejía, ni ha subido, ni ha bajado, desde el 15 de agosto hasta el 14 de noviembre.

El congelamiento en las simpatías de una candidatura por un largo espacio de tiempo -tres meses- constituye la fase previa para caer en el precipicio. Si se tratara de una candidatura emergente, de un liderazgo nuevo, la lectura pudiera ser que se ha colocado en una fase estacionaria para tomar impulso y luego subir a la cima, pero ese no es el caso de la candidatura de Hipólito Mejía.

La candidatura de Hipólito Mejía es vieja, es un producto conocido por el ciento por ciento de la población, con una alta tasa de rechazo, y que carece de recursos innovadores que les pudieran ayudar a dar un golpe de sorpresa y crecer en las simpatías.

El sondeo realizado por la Gallup y publicado en el prestigioso matutino Hoy, este lunes 20 de noviembre del 2011, donde Hipólito Mejía aparece con un 47.9 % frente a un 42.6% de Danilo Medina, al analizarlo de forma comparada con el sondeo de agosto de la misma firma encuestadora, solo tiene una lectura, y es que “una candidatura ha subido nueve puntos de simpatías, y otra está frisada.”

Si utilizamos los dos sondeos de la Gallup como instrumentos para proyectar las tendencias de crecimientos y caídas de la popularidad de los candidatos Hipólito Mejía y Danilo Medina, debemos predecir el escenario electoral futuro, del modo siguiente:

“Danilo Medina seguirá creciendo, y ahora con la escogencia de la Primera Dama, doctora Margarita Cedeño de Fernández como compañera de boleta, su crecimiento se tornará más acelerado. Hipólito Mejía, por el contrario comenzará a caer, y percibo que tendrá una caída estrepitosa.”

Todo parece indicar que el 47.9 % de Hipólito Mejía es su techo. El candidato del PRD ahora tiene un techo un poco inferior que en el 2000 cuando estaba en su mejor momento político y no pudo escalar al 50% de los sufragios en la primera vuelta.

A pesar de ser un candidato de la oposición, Hipólito Mejía tiene una tasa de rechazo muy superior a la del candidato del PLD, y ese es un indicador de que su mala imagen impedirá que se nutra de un posible desgaste del gobierno, como sus estrategas tenían en mente. De acuerdo con el sondeo de noviembre, la tasa de rechazo de Hipólito es 36.5% frente a 28.8% de Danilo Medina.

Hasta ahora Danilo Medina, según los sondeos de la Gallup, ha venido creciendo nutriéndose de las simpatías de los votantes que están al margen de Hipólito Mejía y del PRD. Pero de aquí en adelante, y es inevitable que así suceda, Danilo Medina crecerá también recibiendo el respaldo de votantes que están identificados con el candidato del PRD, pero que no están seguros de que votarán por él.

Cuando una candidatura viene en fase de crecimiento y luego se estanca faltando un largo trecho de tiempo para la campaña electoral, como le ha sucedido a Hipólito Mejía, es muy probable que en la medida en que se acerca el día de las elecciones, vaya perdiendo sus votos blandos.

Percibo que la campaña electoral ha recibido un nuevo ingrediente que les dará el knock-out a Hipólito Mejía en la primera vuelta, el 20 de mayo del 2011, y se trata de la candidatura vicepresidencial de la Primera Dama, doctora Margarita Cedeño de Fernández, quien tiene una tasa de rechazo inferior que los dos candidatos presidenciales, y que además debido al trabajo social que ha realizado, posicionará favorablemente a la candidatura de Danilo Medina tanto en el género femenino como en nichos de la población que históricamente no han estado ligados y comprometidos con el PLD. La Primera Dama cuando sea debidamente mercadeada podría incidir también en el segmento joven del electorado, los cuáles según el sondeo son más proclives a cambiar de preferencias.

En el sondeo de junio la principal fortaleza de Hipólito Mejía y la principal debilidad del PLD estaban reflejadas en los nuevos votantes. Ahora es en ese segmento donde hay más indecisión y disposición al cambio de preferencias. De ese estado mental de los jóvenes se puede colegir que Hipólito comenzará pronto, muy pronto, a perder las simpatías de nuevos electores que en un momento dado estaban disgustados con el gobierno del PLD y se mostraron simpatizantes con su candidatura, pero que ahora lo están pensando.

La candidatura de Danilo Medina, según la Gallup, de agosto hasta la fecha ha crecido 9.1 puntos, sin todavía haberse nutrido del endosamiento de popularidad que le hará la candidatura vicepresidencial de la Primera Dama, que precisamente es el domingo 27 de noviembre cuando será oficialmente proclamada en un masivo acto en Santiago de los Caballeros. La candidatura de Danilo también se beneficiará del impacto que tendrá, a partir de enero del 2012, la entrada en el escenario del presidente Leonel Fernández.

En conclusión, el análisis de los sondeos de la Gallup, nos conducen a percibir que la candidatura de Danilo Medina se mantendrá creciendo, -de aquí a febrero crecerá a un ritmo más acelerado que el manifestado desde agosto hasta el momento-, mientras que la candidatura de Hipólito Mejía saldrá de la fase de congelamiento y entrará en descenso.
 Autor: Belarminio Ramírez Morillo.... para el nuevo diario